Bienvenidos a una nueva entrada de nuestro blog. Muchas veces no estamos seguros de si nuestros hijos pueden tener algún pequeño problema de visión. Aquí te dejamos 12 señales que talvez puedas observar en tu hijo para saber si puede necesitar gafas.
Señales que nos dan pistas
Los problemas de visión en la infancia pueden manifestarse de formas poco evidentes. Los signos no siempre son tan claros como ver a su hijo entrecerrar los ojos o escucharle hablar de visión borrosa.
Las imperfecciones de la vista son habituales entre los niños en edad escolar, y el tratamiento puede ser tan sencillo como un par de gafas graduadas. Pero si los problemas de visión no se diagnostican o no se tratan, pueden tener efectos duraderos en la salud ocular del niño, en su escolarización y en su confianza al realizar actividades normales.
Estos sutiles signos pueden sugerir problemas de visión en los niños:
- Tienden a cerrar un ojo durante actividades como leer o ver la televisión
- Evitan las actividades que requieren visión de cerca (lectura, deberes, uso del ordenador) o visión de lejos (deportes, otras actividades recreativas)
- Sus notas son más bajas de lo normal
- Te dicen que tienen los ojos cansados o que les duele la cabeza
- Se frotan mucho los ojos
- Parecen sensibles a la luz
- Sus ojos lagrimean sin motivo aparente
- Sostienen los libros inusualmente cerca de su cara
- Pierden su lugar mientras leen
- Utilizan el dedo para guiar los ojos a lo largo de la página
- Se sientan muy cerca de la televisión o de la pantalla del ordenador
- Entrecierran los ojos o inclinan la cabeza para ver mejor
Si tu hijo muestra alguno de estos signos, un oftalmólogo puede ayudarte a averiguar si un problema ocular es la causa subyacente.
Errores de refracción en la infancia
Dentro de las señales de que tu hijo puede necesitar gafas, los errores de refracción son las causas más comunes de problemas de visión entre los niños en edad escolar. Cuando los niños tienen un error de refracción, suele ser uno de los siguientes:
- Miopía
- Hipermetropía
- Astigmatismo
En algunos casos, un niño puede tener astigmatismo y miopía o hipermetropía al mismo tiempo.
Estos defectos de refracción suelen corregirse con unas gafas o lentes de contacto graduadas. Después de la revisión ocular de tu hijo (y de la adaptación de las lentes de contacto, si es necesario), recibirás una prescripción visual que podrás utilizar para comprar gafas o lentes de contacto donde quieras.
La miopía es un problema creciente entre los niños.
Es natural que la miopía empeore un poco a lo largo de la infancia y la adolescencia, pero a veces progresa demasiado rápido. Esto se conoce como miopía progresiva, y puede conducir a una condición llamada miopía alta.
Este alto nivel de miopía aumenta en gran medida el riesgo de desarrollar enfermedades que amenazan la visión, como el desprendimiento de retina, la degeneración macular, las cataratas y el glaucoma más adelante.
Afortunadamente, ahora hay formas de reducir estos riesgos frenando la progresión de la miopía, por ejemplo con las lentes orto-k, un tipo de lentillas que se ponen durante la noche y se quitan durante el día.
Otros problemas oculares de la infancia
Los errores de refracción cambian el modo en que la luz se registra en el interior del ojo, pero otras afecciones oculares infantiles pueden afectar al modo en que los ojos se mueven juntos.
Se cree que entre el 5% y el 10% de los niños en edad escolar tienen un problema de agrupación o enfoque de los ojos.
Estas afecciones incluyen:
- Estrabismo: un problema de alineación de los ojos. El estrabismo suele denominarse “ojos cruzados”, aunque eso sólo explica un tipo de estrabismo: la esotropía.
- Ambliopía: también llamada “ojo vago”. La reducción de la visión en un ojo hace que el ojo afectado se “aleje” del centro de visión.
- Insuficiencia de convergencia: una forma de exotropía intermitente, que es en sí misma un tipo de estrabismo. Los ojos tienen dificultades para trabajar juntos para enfocar objetos cercanos. Cuando un niño intenta enfocar algo cercano, un ojo se desvía ligeramente hacia fuera en lugar de hacia dentro.
Los errores de refracción y los problemas de enfoque no son los únicos que pueden afectar a la vida de un niño.
Otros problemas comunes
- El daltonismo: El daltonismo, más conocido como deficiencia de la visión de los colores, provoca problemas para ver algunos colores, pero raramente todos. Existen varios tipos de daltonismo.
- Pérdida de visión: Las causas más comunes son las lesiones, las afecciones congénitas y las complicaciones derivadas de otros problemas de salud. Alrededor del 3% de los niños menores de 18 años tienen problemas de visión o son ciegos.
Conexión de la visión con los trastornos de atención y aprendizaje
Entre el 5% y el 15% de los niños en edad escolar padecen un trastorno del aprendizaje. Alrededor del 80% de ellos son trastornos de la lectura, como la dislexia. Casi 1 de cada 10 niños en edad escolar padece un trastorno por déficit de atención/hiperactividad (TDAH).
Estas condiciones no son trastornos de la visión en sí mismas, pero pueden coexistir con ciertos problemas oculares.
La insuficiencia de convergencia es uno de estos problemas. Es conocida por causar problemas de atención que son fáciles de confundir con el TDAH, y es tres veces más común en personas con TDAH que en las que no lo padecen.
Además de los síntomas visuales como la visión borrosa o doble, la insuficiencia de convergencia puede causar problemas de atención que incluyen:
- Dificultad para mantener la concentración
- Dificultad para mantenerse en su sitio mientras lee
- Lectura lenta
Afortunadamente, el tratamiento de la insuficiencia de convergencia suele ser muy eficaz y puede ayudar al niño a recuperar la atención.
¿Con qué frecuencia deben los niños someterse a exámenes oculares o revisiones de la vista?
Los exámenes de la vista son una forma popular de controlar la salud ocular de los niños a medida que crecen. Aunque no sustituyen a un examen ocular completo, estas pruebas pueden servir para detectar las señales de que tu hijo pueda necesitar gafas y otros problemas oculares con menos tiempo y coste.
La mayoría de los profesionales de la salud ocular recomiendan el siguiente calendario de revisiones visuales en los primeros años de vida:
- Al nacer
- Entre los 6 y los 12 meses de edad
- Entre 1 y 3 años
- Entre 3 y 5 años
- Después de los 5 años
A medida que los niños avanzan en su edad escolar, la mayoría de las asociaciones de Optometría a nivel mundial, recomiendan un examen ocular cada año, independientemente de que exista un problema de visión.
En Óptica Real estamos atentos a la salud visual de tu hijo
En este artículo sobre las 12 señales de que tu hijo puede necesitar gafas o signos que debes tener en cuenta para detectar un problema de visión en los niños, te hemos descrito los problemas más habituales que suelen darse y que solo necesitan vigilancia y control.
Si estamos realizando un examen rutinario de la vista y sospechamos que hay un problema en los ojos de tu hijo que no está en nuestro ámbito de actuación, te recomendaremos que acudas a un oftalmólogo para que le haga un examen ocular pediátrico más completo.
Esperamos que este artículo haya sido de tu interés, y si tienes alguna duda más o quieres reservar un examen de la vista para tu hijo, solo tienes que llamarnos o rellenar nuestro cuestionario y nos pondremos en contacto contigo lo antes posible.
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