¡Bienvenidos una vez más al blog de Óptica Real! Nos alegra que sigas confiando en nosotros para resolver tus dudas sobre salud visual. Hoy vamos a abordar una consulta muy habitual entre quienes utilizan tanto gafas como lentillas: ¿por qué cada graduación es distinta? A primera vista, puede parecer un error o incluso un descuido, pero en realidad, esta diferencia es completamente normal y se basa en principios ópticos y anatómicos que tienen mucha lógica.
En este artículo vamos a explicarte, paso a paso, por qué ocurre esta discrepancia, cómo se calcula y de qué manera afecta a tu experiencia visual. Y si solo estás pensando en entender la receta de tus gafas, podemos dejarte este enlace donde te dejamos 6 conceptos para que te sea más fácil.
¿Hay un error si veo 2 graduaciones distintas?
Es muy común que, al comparar la prescripción de tus gafas con la de tus lentes de contacto, descubras diferencias en los números que aparecen. Y es natural que esto genere dudas: ¿me habrán medido mal? ¿Ha cambiado mi vista tan rápido? En realidad, no se trata de un error, sino de una diferencia técnica derivada del lugar donde se sitúan ambos tipos de lentes y cómo interactúan con tu ojo. En esta entrada, vamos a profundizar en las causas de esta variación, que incluyen elementos como la distancia al ojo, la forma de la córnea y la tecnología específica de cada tipo de lente. También veremos por qué es tan importante confiar en profesionales cualificados para adaptar correctamente tus lentes de contacto.
¿Por qué difieren las graduaciones entre gafas y lentillas?
La distancia al vértice
Uno de los factores clave que explica la diferencia entre ambas graduaciones es la llamada «distancia al vértice». Este término técnico se refiere a la separación entre la superficie de la lente y la córnea del ojo. En el caso de las gafas, esta distancia suele ser de entre 12 y 14 milímetros, ya que la montura se apoya sobre la nariz y no directamente sobre el ojo. En cambio, las lentillas descansan directamente sobre la córnea, eliminando esa distancia. Esta diferencia cambia la forma en que la luz entra al ojo y se enfoca en la retina, sobre todo cuando hablamos de graduaciones altas.
Efecto de la distancia en la corrección visual
Cuando la lente está más alejada del ojo —como ocurre con las gafas—, se necesita una potencia ligeramente distinta para enfocar la imagen en el lugar correcto. Esto significa que, aunque los síntomas de visión borrosa sean los mismos, la solución óptica no es idéntica. En el caso de las lentillas, al estar tan cerca del ojo, la potencia requerida es menor (en miopía) o mayor (en hipermetropía) para conseguir el mismo efecto. Esta diferencia puede parecer pequeña, pero es crucial para obtener una visión nítida y cómoda. Por eso, adaptar una receta de gafas para usar lentillas requiere una evaluación específica.
¿Qué es la distometría?
Definición y aplicación
La distometría es una herramienta fundamental en el trabajo del optometrista. Se trata de un cálculo que permite ajustar la graduación de las gafas a una adecuada para lentillas, teniendo en cuenta, precisamente, la distancia al vértice. Este procedimiento se vuelve indispensable cuando se trata de corregir defectos refractivos más pronunciados, como la miopía o hipermetropía elevada. Además, asegura que el paciente disfrute de la mejor visión posible sin forzar la vista ni causar molestias o errores en la corrección.
Fórmula de conversión
Para hacer esta conversión, se utiliza una fórmula matemática bastante precisa:
Potencia de la lentilla = Potencia de la gafa / [1 – (distancia al vértice en metros × potencia de la gafa)]
Este cálculo toma en cuenta la potencia de la lente de las gafas y la transforma para que sea efectiva al estar en contacto directo con la córnea. Si bien este ajuste puede parecer complejo, forma parte del trabajo diario del optometrista y se aplica de manera rutinaria en las consultas para garantizar la comodidad y eficacia de las lentes de contacto.
¿Cuándo es necesaria la conversión de graduación para gafas y lentillas?
Casos comunes
No siempre es imprescindible hacer esta conversión, pero existen situaciones en las que se vuelve fundamental. Por ejemplo:
- Miopía o hipermetropía alta: A partir de ±4.00 dioptrías, las diferencias entre gafas y lentillas son mucho más evidentes y pueden provocar errores importantes si no se ajustan adecuadamente.
- Astigmatismo: Las lentillas tóricas, diseñadas específicamente para corregir el astigmatismo, requieren parámetros personalizados que no se reflejan en una receta de gafas estándar.
- Presbicia: En pacientes con vista cansada, especialmente cuando se utilizan lentes multifocales o progresivas, es vital adaptar correctamente la graduación a las necesidades de cada distancia visual.
Importancia de la adaptación personalizada para una graduación perfecta de gafas y lentillas
Cada ojo tiene una forma única, y aspectos como la curvatura corneal, el tamaño del globo ocular o incluso la cantidad de lágrima producida afectan directamente cómo se comporta una lentilla. Por eso, es esencial acudir a un centro óptico especializado para realizar un estudio personalizado y así lograr una adaptación cómoda, segura y efectiva. Una receta genérica no garantiza buenos resultados.



Es decir, la adaptación personalizada de lentillas es esencial porque cada ojo tiene características únicas que influyen directamente en la comodidad, la eficacia y la salud ocular al usar lentes de contacto. Factores como la curvatura corneal, el diámetro de la córnea, el tamaño del globo ocular y la cantidad o calidad de la lágrima varían de una persona a otra y determinan el tipo y ajuste de la lentilla que se debe utilizar.
Ventajas de una adaptación personalizada:
- Comodidad superior: Las lentillas adaptadas a la forma específica del ojo reducen molestias, irritaciones y la sensación de cuerpo extraño, permitiendo un uso prolongado y confortable.
- Salud ocular: Un ajuste incorrecto puede provocar daños en la córnea, aumentar el riesgo de infecciones y favorecer la aparición de problemas como ojo seco o irritaciones crónicas.
- Visión óptima: Solo una adaptación individualizada garantiza la máxima calidad visual, ya que las lentillas se ajustan a las necesidades de graduación y características anatómicas de cada usuario.
- Prevención de complicaciones: Las revisiones periódicas y el seguimiento profesional permiten detectar y corregir a tiempo cualquier problema derivado del uso de lentillas, minimizando riesgos y asegurando la eficacia del tratamiento.
El proceso de adaptación personalizada incluye:
- Evaluación de la salud ocular y de la superficie del ojo.
- Medición precisa de la curvatura corneal y el diámetro corneal.
- Análisis de la cantidad y calidad de la lágrima.
- Pruebas con diferentes tipos y tamaños de lentillas hasta encontrar el ajuste perfecto.
- Seguimiento regular para valorar la tolerancia y el estado ocular a largo plazo.
Una receta genérica no garantiza de ninguna forma buenos resultados, ya que no contempla las particularidades anatómicas ni las necesidades visuales individuales. Por eso, siempre se recomienda acudir a un centro óptico especializado donde un óptico-optometrista pueda realizar un estudio personalizado y adaptar las lentillas de forma segura y eficaz.
¿Se puede usar la misma receta de graduación para gafas y lentillas?
Diferencias en las prescripciones
Aunque ambas recetas buscan corregir tu visión, la de lentillas incluye varios parámetros adicionales que no están presentes en la de gafas:
- Curva base (BC): Es la curvatura de la parte interna de la lentilla y debe coincidir con la forma de tu córnea.
- Diámetro (DIA): Afecta la cobertura y estabilidad de la lentilla sobre el ojo.
- Material y marca: Cada lente tiene diferentes niveles de permeabilidad al oxígeno y se adapta mejor a ciertos ojos según sus características.
- Fecha de caducidad: Las prescripciones para lentillas tienen un tiempo limitado de validez, generalmente un año, ya que los ojos pueden cambiar.
Riesgos de usar la receta incorrecta
Utilizar una receta de gafas para comprar lentillas puede provocar varios problemas: desde una visión deficiente hasta molestias severas o incluso complicaciones como sequedad ocular, irritaciones o infecciones. Por eso, siempre es recomendable acudir a un profesional y obtener una receta específica para lentes de contacto, adaptada a tus necesidades y estilo de vida.


¿Cómo se realiza un estudio personalizado para adaptar lentillas?
La adaptación personalizada de lentillas es un proceso meticuloso que debe ser realizado por un óptico-optometrista como los que tenemos en Óptica Real, liderados por Juan Bolívar. Este procedimiento garantiza que las lentes de contacto se ajusten perfectamente a las características anatómicas y necesidades visuales de cada persona, proporcionando comodidad, seguridad y una visión óptima. El proceso suele incluir los siguientes pasos:
1. Evaluación inicial y anamnesis
- Se realiza una entrevista para conocer el motivo por el que el paciente desea usar lentillas, su estilo de vida, necesidades visuales, antecedentes médicos y posibles medicamentos que puedan afectar la salud ocular o la tolerancia a las lentes82.
2. Examen visual y salud ocular
- Se efectúa una refracción precisa para determinar la graduación necesaria.
- Se realiza una biomicroscopía para examinar la córnea, la conjuntiva, los párpados y la película lagrimal, descartando patologías o alteraciones que puedan contraindicar el uso de lentillas.
3. Medición de parámetros oculares
- Se mide la curvatura y el diámetro corneal mediante técnicas como la queratometría y la topografía corneal, que permiten obtener un mapa detallado de la superficie del ojo y elegir el tamaño y material más adecuado para la lente.
- Se evalúa el diámetro pupilar y la cantidad/calidad de la lágrima para seleccionar el tipo de lente más compatible y evitar problemas de sequedad ocular.
4. Selección del tipo de lentilla
- Según los resultados de las pruebas, el especialista recomienda el tipo de lente más adecuado: blandas, rígidas permeables al gas, tóricas para astigmatismo, multifocales para presbicia, lentes especiales para queratocono, etc.
5. Prueba y adaptación
- Se colocan lentillas de prueba en el ojo del paciente para valorar el ajuste, la movilidad, la comodidad y la calidad visual.
- Se enseña al usuario cómo colocar, retirar y cuidar las lentillas correctamente.
6. Seguimiento y ajustes
- Tras la primera prueba, se programa una cita de revisión para evaluar la adaptación, el confort y la visión. Si es necesario, se realizan ajustes en la prescripción o en el tipo de lente hasta lograr el resultado óptimo.
7. Educación y mantenimiento
- El paciente recibe información sobre el uso, limpieza y almacenamiento de las lentillas, así como recomendaciones para evitar infecciones y mantener la salud ocular.
La personalización en la adaptación de lentillas es fundamental para garantizar la máxima comodidad, visión y seguridad, ya que cada ojo es único y requiere un estudio detallado antes de elegir la lente adecuada. Juan Bolívar
En resumen, un estudio personalizado para adaptar lentillas implica una evaluación integral de la salud y anatomía ocular, la selección cuidadosa del tipo de lente y un seguimiento profesional para asegurar la mejor experiencia visual y evitar complicaciones.
Duración del proceso de adaptación de lentillas
El proceso de adaptación a las lentillas suele ser rápido, pero varía según la persona, el tipo de lente y la experiencia previa con lentes de contacto. En la mayoría de los casos:
- El periodo de adaptación oscila entre unos pocos días y dos semanas para la mayoría de los usuarios. Durante este tiempo, es normal experimentar una ligera molestia, sensación extraña o incluso mareos leves, especialmente si es la primera vez que se usan lentillas.
- Para lentillas multifocales o progresivas, el proceso puede extenderse hasta dos semanas, aunque muchas personas se adaptan en solo unos días.
- En el caso de lentillas especiales como las de ortoqueratología (Orto-K), la adaptación puede requerir hasta cuatro semanas y varias visitas de control. Sobre este tema de las lentillas Orto-K, contamos con una guía muy completa que puedes ver en este enlace.
- El periodo de prueba recomendado por los especialistas suele ser de una semana, tiempo suficiente para evaluar la comodidad y la tolerancia a las lentillas.
Factores que influyen en el tiempo de adaptación
- Tipo y material de la lentilla (blandas, rígidas, multifocales, tóricas, etc.).
- Sensibilidad ocular y cantidad de lágrima.
- Experiencia previa con el uso de lentes de contacto.
- Ajuste y personalización de la lente a la anatomía del ojo.
Recomendaciones
- Incrementar el tiempo de uso de manera progresiva durante la primera semana7.
- Seguir las indicaciones del óptico-optometrista y acudir a las revisiones pautadas.
- Si las molestias persisten más allá de dos semanas o son intensas, consultar al especialista.
La adaptación a las lentillas suele durar entre unos días y dos semanas, aunque puede variar según el tipo de lente y las características individuales de cada usuario.
Preguntas frecuentes sobre graduación de gafas y lentillas
¿Por qué la graduación de mis gafas y lentillas no coincide?
La diferencia se debe principalmente a la distancia entre la lente y el ojo. Mientras las gafas se colocan a unos milímetros de la córnea, las lentillas están en contacto directo. Esta diferencia requiere un ajuste en la potencia de corrección.
¿Puedo usar la misma receta para gafas y lentillas?
No, ya que las lentillas necesitan parámetros adicionales como curva base, diámetro y tipo de material, además de una adaptación personalizada para asegurar que sean cómodas y seguras.
¿Es necesario adaptar las lentillas si ya uso gafas?
Sí, cada tipo de corrección visual requiere una evaluación independiente. Aunque ya tengas graduación en gafas, las lentillas necesitan un estudio especial para ajustarse correctamente al ojo.
¿Cuánto tiempo dura la adaptación a las lentillas?
El tiempo de adaptación varía entre personas, pero generalmente oscila entre una y dos semanas. Durante este tiempo, se debe seguir al pie de la letra las indicaciones del profesional y acudir a los controles programados.
Enlaces internos al blog de Óptica Real
Para seguir aprendiendo sobre salud visual, te invitamos a visitar otros artículos de nuestro blog:
- Lentes para presbicia: ¿cuál es la mejor opción?
- Fatiga visual y pantallas: causas y soluciones
- Consejos para entender una receta de gafas
Entonces una graduación para gafas y otra para lentillas
Conocer las diferencias entre la graduación de gafas y lentillas no solo te ayuda a entender mejor tu salud visual, sino que también te prepara para tomar decisiones informadas. En Óptica Real, ponemos a tu disposición nuestra experiencia y tecnología para ofrecerte una adaptación personalizada y precisa. Si estás pensando en pasarte a las lentillas, o simplemente quieres asegurarte de que tu corrección visual es la más adecuada, te invitamos a visitarnos.
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